Reseña Histórica de la ACCB

En el año de 1965 bajo el bajo el liderazgo de Enrique Tono, Jefe del Departamento de Bioquímica de la Universidad del Valle, se organiza en Cali una reunión de docentes para discutir los objetivos de la docencia y la investigación en Bioquímica en Colombia y las estrategias para lograrlos. A pesar de que el grupo era pequeño, había representación de casi todas las Facultades de Medicina del país.

A través de las discusiones académicas fue pronto aparente la necesidad de tener una Asociación que agrupase a los bioquímicos del país con fines netamente docentes e investigativos y que propendiese por estimular la investigación en bioquímica y en todas las áreas que utilizasen técnicas bioquímicas. Se tomo la decisión de celebrar un primer congreso el año siguiente, en Medellín, e invitar a presentar trabajos no solo a los investigadores colombianos sino a los venezolanos.

Así, nació lo que es hoy la Asociación de Ciencias Biológicas. Sus gestores Enrique Tono, Fernando Arias, Vicente Piazuelo y Heli Alzate, todos bioquímicos, le dieron inicialmente el nombre de Asociación Colombiana de Bioquímica.

En octubre de 1966 se realizó el primer Congreso de la nueva asociación. A Medellín fueron llegando por sus propios medios, no solamente bioquímicos, sino también farmacólogos, endocrinólogos y otros profesionales básicos, que encontraban por primera vez en Colombia un sitio en donde encontrarse con personas que compartían sus inquietudes y sus dificultades en investigación y a quienes podían legítimamente presentar sus trabajos experimentales.

Este primer Congreso contó con la presencia de Karl Garde, el tudesco que había venido de Venezuela a iniciar la disciplina bioquímica y quien después de muchos anos de continuado y fértil trabajo en el entrenamiento de los bioquímicos de su segunda patria. En asamblea se estudiaban los primeros estatutos y elegía la primera junta directiva, se sentaban las bases de la cooperación interamericana en bioquímica que anos después y contando con este terreno abonado, fructificaría en la Asociación Panamericana de Sociedades de Bioquímica (PAABS).

El año de 1972 fue el inicio de una nueva etapa de la Asociación. La ampliación de su cobertura dio lugar para que se invitara la participación científica de los profesores de biología de las universidades colombianas y para que estos respondieran aunque en forma limitada, en el congreso que ese año se celebró en Cali.

El Congreso de Pasto dividió en dos la historia de la Asociación. A pesar del cambio de estatutos que se hizo en Popayán, la Asociación continuaba siendo de profesores universitarios y para profesores universitarios, con énfasis en las ciencias básicas médicas. La Universidad de Nariño no tenía una Facultad de Medicina y sus profesores de Biología servían principalmente las Carreras de Licenciaturas en Educación y en Ciencias Agropecuarias. Por consiguiente la mayor parte de la audiencia seria de este campo. Por primera vez los organizadores permitirían la asistencia de estudiantes universitarios y de profesores y alumnos de bachillerato.

A partir del Congreso de Pasto, la Asociación adquiere su fisonomía actual, aunque se producirían posteriormente cambios de tipo administrativo y operativo que resultarían en la forma de trabajo que hoy conocemos, con una organización descentralizada y una actividad continua en la difusión del conocimiento de nuestro medio biológico.

En 1985 se cumplieron veinte años de fecunda e interrumpida labor por parte de la ACCB con sus objetivos fundamentales de promover, divulgar y estimular la investigación científica en el país y nada mejor que, un Congreso excelentemente organizado y realizado en Santa fe de Bogotá, felizmente coincidente con el Congreso Latinoamericano de Genética, en el cual un significativo número de socios de la ACCB presentaron ponencias y trabajos al lado de los importantes avances investigativos de los participantes internacionales.

A partir del Congreso de Pasto, la Asociación adquiere su fisonomía actual, aunque se producirían posteriormente cambios de tipo administrativo y operativo que resultarían en la forma de trabajo que hoy conocemos, con una organización descentralizada y una actividad continua en la difusión del conocimiento de nuestro medio biológico.

En 1985 se cumplieron veinte años de fecunda e interrumpida labor por parte de la ACCB con sus objetivos fundamentales de promover, divulgar y estimular la investigación científica en el país y nada mejor que, un Congreso excelentemente organizado y realizado en Santa fe de Bogotá, felizmente coincidente con el Congreso Latinoamericano de Genética, en el cual un significativo número de socios de la ACCB presentaron ponencias y trabajos al lado de los importantes avances investigativos de los participantes internacionales.